Después de señalar que no se trató de un secuestro, la FGE precisó que el juicio de la causa penal por la sustracción de una menor por su propia madre fue clasificado como reservado, por la seguridad psicológica y emocional de la presunta víctima.
El Delegado de la Fiscalía General del Estado, Rodrigo Cháirez Zamora, reiteró que la reciente sustracción de una menor no se trata de un secuestro.
El caso involucra a la madre de la menor, lo que modifica la clasificación legal, según explicó Cháirez Zamora.
El juicio penal de la sustracción de la menor fue clasificado como “reservada” para proteger la seguridad psicológica y emocional de la niña durante el proceso legal, informó la Fiscalía.
Dado que la sustracción fue realizada por la madre, no se considera un secuestro según la legislación vigente, aclaró el delegado regional.
La FGE y la Procuraduría para Niños, Niñas y la Familia decidieron manejar el caso con total discreción. Buscan garantizar el bienestar integral de la menor, protegiéndola de una mayor exposición pública.
Cháirez Zamora subrayó que la protección de los derechos y el bienestar emocional de los menores es prioridad en este tipo de situaciones familiares.
Aunque la sustracción generó alarma, el contexto familiar fue determinante en cómo las autoridades decidieron proceder legalmente con el caso.
El delegado reafirmó que se continuará manejando la situación de forma responsable, asegurando que la menor reciba toda la protección necesaria.
Las autoridades no brindaron más detalles sobre el estatus legal de la madre ni sobre las próximas acciones debido a la naturaleza sensible del caso.
