Ante el incremento en los contagios de COVID-19, la Diócesis de Saltillo ha solicitado retomar medidas de prevención. Entre ellas, el uso de cubrebocas para evitar la propagación del virus.
El sacerdote José López Sandoval, párroco del Santuario de Guadalupe en Monclova, recibió instrucciones de la Diócesis. Señala que, por la salud de todos, el uso de cubrebocas será obligatorio en celebraciones y actividades.
La medida se enfatiza especialmente para personas propensas a enfermedades respiratorias y adultos mayores. Además, instalarán gel antibacterial o soluciones antisépticas en la entrada de las iglesias.
Este esfuerzo busca evitar un rebrote de contagios en la comunidad religiosa de Saltillo. Aunque no se han incrementado los casos, se desea prevenir una ola de casos positivos.
José López Sandoval aseguró que se sanitizará el templo con regularidad. A pesar de que el uso de cubrebocas no es obligatorio, se quiere fomentar su uso.
El objetivo es que las personas se cuiden y concientizar a las más vulnerables. Esta iniciativa pretende asegurar un entorno más seguro durante los servicios religiosos.
Externó que la Diócesis de Saltillo está comprometida en proteger la salud de su congregación. Por ello, han adoptado estas medidas preventivas contra el virus SARS-CoV-2.
Las autoridades religiosas esperan la colaboración de todos los feligreses. Así, juntos podrán evitar la propagación del Covid-19 en la comunidad.
La implementación de estas acciones es un paso proactivo ante la incremento de casos postivos al virus. Con la cooperación de los asistentes, se espera minimizar el riesgo de contagios.
José López Sandoval hizo un llamado a la responsabilidad y solidaridad de todos. Cuidar de la salud propia y ajena es esencial en estos tiempos.
Las medidas preventiva serán aplicadas en todas las iglesias de las regioens Sureste, Centro y Desierto, que pertenecen a la Diócesis de Saltillo, explicó el prelado.