En esta temporada para decembrina, la Iglesia Católica llama a no caer en depresión y salir adelante con la fe. Conmina a alcanzar la alegría en Dios.
Pasar del pecado a la gracia, del egoísmo a la caridad, de la negación de la cruz al amor a Cristo crucificado y del miedo a la confianza son los pasos necesarios para alcanzar la alegría en el Señor. Así lo señaló Monseñor Néstor Rodríguez, durante su homilía en la misa dominical en la parroquia de Santiago Apóstol, en Monclova.
El sacerdote indicó que el primer paso es dejar el pecado y vivir en gracia. Destacó que el pecado esclaviza y aleja de la verdadera felicidad. Invitó a los fieles a reflexionar en el tiempo de Adviento y hacer una buena confesión que los guíe hacia el Señor.
El segundo paso, explicó, consiste en superar el egoísmo y practicar la caridad. Señaló que dar tiempo, atención y ayuda a los demás construye una paz interior. “Hay más alegría en dar que en recibir. Al compartir lo que somos, encontramos satisfacción y alegría profunda”, comentó.
Aceptar la cruz y confiar en Dios
El tercer paso, indicó Monseñor Rodríguez, es aceptar la cruz con amor en lugar de rechazar las dificultades. Subrayó que contemplar a Cristo crucificado ayuda a enfrentar los padecimientos con fortaleza. “Amar a Cristo crucificado nos enseña a aceptar lo que vivimos y a encontrar sentido en ello”, expresó.
El último paso es pasar del miedo a la confianza plena en el Señor. Afirmó que los temores suelen paralizar, pero confiar en que Dios está presente permite enfrentar cualquier adversidad. “El Señor camina siempre a nuestro lado. Su presencia nos llena de esperanza y alegría”, destacó.
Monseñor Néstor Rodríguez, quien también es guía espiritual en la parroquia, concluyó invitando a los fieles a poner estos pasos en práctica. “La alegría en el Señor transforma nuestra vida y se refleja en una sonrisa capaz de cambiarlo todo”, finalizó.
