La soberbia y los prejuicios son actitudes individuales que afectan a la sociedad, señaló la Iglesia Católica. El Padre Francisco González Escalante, sacerdote del templo de Santiago Apóstol, expuso lo anterior.
Durante su sermón en la misa dominical, el sacerdote destacó que la arrogancia y las etiquetas sociales ciegan a las personas y las hacen sentir superiores. “Quien se llena con soberbia deja de ver con claridad a los demás”, dijo el sacerdote.
Además, agregó que estas actitudes impiden aceptar enseñanzas, palabras ni correcciones. El Padre Francisco González también mencionó que la soberbia hace que las personas dejen de ver con caridad y amor a quienes los rodean.
Subrayó la importancia de la humildad y la apertura en las relaciones humanas. Durante el sermón, se hizo un llamado a la comunidad a reflexionar sobre sus propias actitudes y comportamientos.
El sacerdote instó a los fieles a practicar la empatía y la comprensión. Finalizó su mensaje exhortando a la congregación a vivir con humildad y amor al prójimo. La Iglesia Católica busca promover estos valores para mejorar la convivencia social.
El mensaje del Padre Francisco González resonó entre los asistentes a la misa. Muchos fieles expresaron su acuerdo con las palabras del sacerdote y su importancia en la vida diaria.
La soberbia y los prejuicios no solo afectan a individuos, sino que también dañan el tejido social. La Iglesia Católica considera crucial abordar estos temas en sus sermones y actividades comunitarias.
El templo de Santiago Apóstol continuará promoviendo mensajes de humildad, empatía y amor al prójimo. La comunidad es llamada a poner en práctica estos valores en su vida cotidiana.
El Padre Francisco González espera que su mensaje inspire cambios positivos en la conducta de las personas. La Iglesia seguirá trabajando para fomentar una sociedad más justa y solidaria.